Después de la victoria sobre la selección de Camerún, el Nzalang dedicó la jornada de ayer jueves a descansar y disfrutar de un curso de golf que les brindó la dirección de su hotel de concentración, el Sofitel Malabo Sipopo Le Golf.

Las chicas del Nzalang estaban felices tras la gran victoria de semifinales y ayer pudieron disfrutar de un día de relax, en el que aprovecharon para realizar algunas fotos durante un pequeño curso de golf que les organizó el hotel de concentración.

La jornada contó con la presencia de los Secretarios de Estado, Ruslan Obiang Nsue y Carmelo Martín Modu Ebuka, que mostraron su total apoyo a las jugadoras del Nzalang y les transmitieron sus felicitaciones por el gran juego desarrollado y el haber conseguido llegar a la final del próximo domingo.

Después de las clases impartidas por los responsables del campo de golf, se hicieron equipos de dos jugadoras y de técnico y jugadora, que disputaron un torneo de nueve hoyos en el putting green. Las risas por los malos golpes y los saltos de alegría por los buenos fueron continuas, y las chicas lo pasaron en grande. Finalmente y tras una dura competición, resultaron vencedoras la portera Miriam y Adriana, con un resultado digno de profesionales.

La tarde la dedicaron a disfrutar de la piscina, pasear por la playa y descansar en las instalaciones del hotel, donde pudimos pulsar la opinión de algunas jugadoras de cara a la gran final.

Vania nos confesaba que tenía sentimientos encontrados: “Ayer, después del partido, estábamos muy felices. Cantamos, bailamos, ahora estamos más relajadas y comenzamos a pensar en la final”. Dulcia afirmaba que se mostraba segura de las posibilidades del equipo: “Estamos tranquilas, sabemos que el partido del domingo es muy importante, pero tenemos mucha confianza”. De la misma opinión era Ana Cristina: “Estamos bien. Respetamos al rival, pero no le tenemos miedo. Nosotras tenemos que jugar como estamos jugando, hacer nuestro juego y todo irá bien”.

Miriam, portera de la selección, que después de cuatro partidos sigue sin encajar un solo gol, nos dijo que el objetivo de terminar el torneo sin ser batida no era sólo suyo, sino de todo el equipo, y se mostró convencida de vencer en la final del domingo.

Respecto al público, Vania dejó un mensaje claro: “No hace falta enviarle ningún mensaje. Ellos hacen todo lo que nosotros necesitamos. La final es algo muy grande y, si ganamos, el regalo de la victoria será para todos. Todos seremos muy felices”.

Texto y fotos: Javier Hernández.
Oficina de Información y Prensa de Guinea Ecuatorial.

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