Cientos de seguidores del Nzalang hacen guardia en el cuartel general de la Selección en Malabo
¡Salimata, Salimata! Es el grito general de la enfervorecida muchedumbre que sigue vitoreando a las chicas del Nzalang después de su llegada ayer a Malabo. El equipo se encuentra instalado en el hotel de la federación, en la ciudad deportiva.
El interés de los ecuatoguineano por sus campeonas se manifiesta en las numerosos grupos de forofos que siguen haciendo guardia en su cuartel general.
Pese a las restricciones de la policía, la gente no abandona a las deportistas, que se han convertido en auténticas heroínas nacionales tras clasificarse para el próximo mundial de fútbol femenino de Alemania 2011. El público quiere dialogar con ellas, pedirles autógrafos, o simplemente distraerse viéndolas en las ventanas del hotel. La mayoría de los seguidores y seguidoras van vestido de rojo, color oficial del uniforme de Nzalang Nacional y, frecuentemente, pronuncian el nombre de Salimata, la jugadora que más goles ha marcado en el campeonato de Sudáfrica.
Además de eso, muchos ecuatoguineanos han realizado donaciones en especie y en metálico para la selección femenina. Gente como Antonio Esono Maquina, quien les ha regalado nada menos que 500.000 francos cefas, o Bienvenido Ndong, que ha donado 100.000; o Ángela Ansue, que les ha enviado una gran cantidad de agua; esto son solamente tres ejemplos de las muestras de generosidad. Todos los ciudadanos de Guinea Ecuatorial, en general, desean aportar algo para agradecer a sus campeonas la alegría de verse, por primera vez en un mundial.
Texto: David Monsuy Senior
Fotos: Clemente Ela Ondo
Oficina de Información y Prensa de Guinea Ecuatorial (D. G. Base Internet)