La reunión ha tenido lugar en Djibouti el 2 y 3 de noviembre de 2024. Reproducimos a continuación el discurso de apertura de S.E. Moussa Faki Mahamat, Presidente de la Comisión de la Unión Africana.

-“Excelentísimo Mohamed Salem Ould Merzoug, Ministro de Asuntos Exteriores, Cooperación y Mauritanos en el extranjero de la República Islámica de Mauritania, Presidente del Consejo Ejecutivo de la Unión Africana, Excelentísimo Mahmoud Ali Youssouf, Ministro de Asuntos Exteriores y de Cooperación Internacional de la República de Djibouti.

Excelencia Hakan Fidan, Ministro de Asuntos Exteriores de la República de Turkiye, Excelencias, damas y caballeros, ministros de Asuntos Exteriores/Relaciones Exteriores de los Estados miembros de la Unión Africana.

Damas y caballeros, en sus respectivos rangos y grados,

Con todo respeto, me complace extender mi saludo fraternal y mi sincero agradecimiento a S.E. Ismail Omar Guelleh, Presidente de la República de Djibouti, al Gobierno y al pueblo de Djibouti por su generoso ofrecimiento de acoger esta importante reunión en esta hermosa ciudad de Yibuti, que nos acoge con la tradición de acogida y hospitalidad cálida y espontánea que reconocen África y el mundo.

En cuanto a usted, mi hermano Mahmoud Ali Youssouf, Ministro de Asuntos Exteriores de la República de Djibouti, le renuevo la expresión de mi amistad fraterna y saludo sus esfuerzos en la preparación de esta reunión ministerial.

Excelencias damas y caballeros,

Desde la formalización de la Asociación Turquía-África en 2008, hemos recorrido un camino rico, marcado por tres cumbres, reuniones ministeriales como ésta, acompañadas de declaraciones y, sobre todo, planes de acción cuya aplicación ha dado un fuerte impulso a lo que inicialmente era sólo una generosa aspiración de África y Turquía.

Como tal, esta reunión se inscribe en una lógica particular, la de una revisión y evaluación del plan de acción conjunto 2022-2024, respaldado por el plan de acción más amplio 2022-2026 que hemos mantenido como hoja de ruta. Por lo tanto, se trata de un hito importante en la vida de la Asociación África-Türkiye.

Esta asociación fue, desde el principio, calificada acertadamente de estratégica, lo que implicaba, por tanto, un compromiso recíproco en la búsqueda de importantes objetivos comunes.

Las transformaciones del mundo actual y la reestructuración resultante nos exigen ser más rigurosos en la evaluación de nuestra acción y en nuestro deseo de realizar los ajustes necesarios. El entorno internacional dominado por desafíos globales, viejos y nuevos, nos inclina a tales ajustes estratégicos con la perspectiva de maximizar el beneficio que se puede extraer de una interdependencia constantemente consolidada por los efectos de una globalización invasiva.

Los desafíos que enfrentamos se presentan en una implacable cuadratura.

El fuerte deterioro del contexto de seguridad global genera una cantidad deprimente de guerras localizadas, sin duda, pero no menos amenazantes para la paz y la seguridad internacionales.

Es probable que en cualquier momento la prolongada guerra ruso-ucraniana se convierta en un conflicto internacional devastador, haciendo añicos la creencia posterior a la Segunda Guerra Mundial de que Europa ha entrado históricamente en una era civilizada de paz duradera que ha pasado definitivamente la página de la violencia como medios para resolver disputas. La guerra injusta y asesina contra el pueblo palestino, que continúa 70 años de flagrante injusticia, negación de todos los derechos humanos y violación sistemática del derecho internacional y del derecho humanitario en particular, hunde al mundo en una era de pisoteo de todos los valores humanos.

Con su extensión al Líbano e incluso a Irán y el Mar Rojo, esta guerra bárbara amenaza con crímenes de guerra, crímenes contra la humanidad en manos de toda la región con una conflagración.

La alteración climática materializada por una perpetua alternancia de sequías e inundaciones repetidas dibuja la segunda dimensión de la cuadratura. Los flujos migratorios, la inseguridad alimentaria, la aparición de nuevas pandemias y los conflictos intercomunitarios han llevado a menudo a una degradación continua del marco ambiental de la vida en la Tierra.

La persistencia de las injusticias, las desigualdades y la exclusión siguen caracterizando la gobernanza global. África y ustedes en Turquía están pagando a sus expensas y a un alto precio estas privaciones insoportables. La inequidad de la arquitectura financiera global, las renuncias y el abandono de la financiación del desarrollo de África, la exclusión de este continente de los mil millones y medio. Los seres vivos completan esta segunda dimensión de los desafíos globales que enfrentamos de una manera menos que estelar.

Las deficiencias en el dominio de los datos científicos y las nuevas tecnologías afectan negativamente nuestro desarrollo y nuestro deseo de construir nuestra prosperidad. Ésta, en mi opinión, es la tercera dimensión fundamental para afrontar los desafíos que nos acosan. El debilitamiento, o incluso el puro y simple declive del multilateralismo, trae, como cuarta dimensión, una complicación importante ilustrada por la debilidad de las cadenas de solidaridad, la ayuda mutua y la búsqueda de logros mutuamente ventajosos.

Excelencia Señor Presidente, damas y caballeros,

La revisión del Plan de Acción 2022-2024 debería permitir identificar las grandes líneas del futuro de nuestra asociación. Esto no puede ser suficiente con una repetición interminable de reuniones en las que nos conformamos con declaraciones de intenciones.

Ya es hora de poner las palabras en acción. No es obligatorio centrarse en grandes logros todos a la vez, en un solo lapso de tiempo. La historia, toda la historia, se construye por etapas. Háganos saber cómo secuenciar nuestra asociación.

Démosle un carácter pragmático. Sepamos infundirle el alma de una filosofía de resultados. Además, nuestra asociación necesita más visibilidad. En este sentido, la clave del éxito serían resultados concretos impulsados por una comunicación eficaz.

No hace falta decir que, para este relanzamiento de nuestra asociación, la UA mantendrá su compromiso de larga data de convertirla en uno de los modelos de nuestro redespliegue internacional al servicio de la paz, la justicia y el desarrollo.

Dotada ahora de nuevos instrumentos de acción: AUDA-Nepad, Zlecaf, la Agencia Africana de Medicamentos, la Agencia Humanitaria Africana y muchos otros, la UA ofrece hoy a sus socios, Turkye en este caso, una multitud de instrumentos con horizontes promocionales.

Es imperativo que tales instrumentos se utilicen para servir de los grandes designios de la asociación, de una asociación en la que todos ganan. Les deseo deliberaciones fructíferas.

Y gracias por su atención”.

Texto: Anatalon Okue

Oficina de Información y Prensa de Guinea Ecuatorial

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