El Presidente de la República inauguró el nuevo Año Judicial 2013 en un acto celebrado en el Palacio de Conferencias de Sipopo, que posteriormente continuó con la inauguración oficial del Palacio de Justicia de Malabo II. El Jefe de Estado volvió a aludir a la necesidad de que los jueces y magistrados contribuyan a mantener la paz y la estabilidad de la nación: “La corrupción contribuye a desestabilizar el país”, dijo S. E. Obiang Nguema Mbasogo.

Un año más, el Jefe del Estado, S. E. Obiang Nguema Mbasogo, ha inaugurado personalmente el Año Judicial 2013, en un acto que se celebró en el Palacio de Conferencias de Sipopo. Durante el mismo participaron, por una parte, el Fiscal General del Estado, David Nguema Obiang y, por otro, el Presidente de la Corte Suprema, Martín Ndong Nsue.

El Fiscal General realizó una extensa exposición en la que analizó el importante y creciente trabajo del ministerio fiscal durante este año y, en segundo lugar, dio datos sobre el aumento de la corrupción y la violencia en Guinea Ecuatorial en los últimos tiempos, concretando que el 60% de la actual población de reclusos está formada por jóvenes, que se organizan cada vez más frecuentemente en bandas juveniles. Nguema Obiang también hizo alusión a la corrupción existente entre muchos funcionarios del país, e igualmente dio datos exactos de las actividades jurisdiccionales en las distintas provincias y juzgados de primera audiencia de todo el Estado.

Por su parte, el Presidente de la Corte Suprema, Martín Ndong Nsue también expuso datos concretos sobre la cantidad de acciones judiciales llevadas a cabo en los diferentes juzgados de Malabo, y especificó otros muchos de los proyectos realizados, como la visita de un grupo de magistrados a París y Burdeos. También habló de las metas que él mismo se había trazado desde que comenzó en el cargo hasta el momento, y recordó la inspección a los juzgados de todo el país que se había desarrollado durante este año pasado. Sobre esta inspección, declaró encontrarse satisfecho: “Se puede afirmar que los magistrados trabajan con imparcialidad. No obstante -recordó igualmente- trabajamos para mejorar el funcionamiento del Poder Judicial”.

La paz y la estabilidad: los bienes más preciados

El acto finalizó con el discurso de S. E. el Presidente de la República, que comenzó su intervención reiterando sus felicitaciones por el año nuevo, tanto a la familia judicial -congregada para la ocasión en el Palacio de Conferencias de Sipopo-, como al resto del pueblo ecuatoguineano: “La apertura del Año Judicial constituye una oportunidad para actualizarnos sobre el funcionamiento de este importante poder del Estado, cuyo objetivo es garantizar, junto con los demás poderes, la justicia la paz, el orden, la cohesión social, la armonía y la estabilidad de la nación”.

Gran parte del contenido del discurso del Presidente se dedicó a subrayar la importancia de la justicia para la constitución de la moderna sociedad de Guinea Ecuatorial: “El ejercicio del que vaya a ser juzgado no debe ser sometido de ninguna manera a los imperativos caprichosos de las personas o a las excusas de los llamados poderes fácticos, leyes obsoletas, incoherencias, o deficiencias de los procesos de intrusión”, e igualmente animó a que se denunciase cualquier caso de irregularidad cometida en la justicia: “Aplaudimos el hecho de que estas supuestas irregularidades se denuncien públicamente en actos como éste”.

El Jefe del Estado también destacó la necesidad de que la justicia empiece a forjar leyes propias que se adapten a las costumbres de la sociedad ecuatoguineana: “Nuestro mayor problema ha sido eliminar el carácter supletorio de las leyes del antiguo administrador, porque están sustentas sobre costumbres de otras comunidades que no guardan relación con la sociedad ecuatoguineana. El Gobierno y el Parlamento deben hacer un esfuerzo para que el ordenamiento jurídico nacional se corresponda con la auténtica vida de la nación”.

Otro tema mencionado en el discurso fue la gravedad de la corrupción en muchas entidades públicas. El Jefe del Estado también acusó de este problema a algunas de las empresas externas que han sobornado a los funcionarios: “Los mismos funcionarios están desviando grandes cantidades de dinero, pero si se les mete en la cárcel, muchas veces los magistrados les liberan en poco tiempo, lo que demuestra que hay connivencia entre ellos. Estas actuaciones son, en realidad, tentativas de desestabilizacion del país”. Respecto a la delincuencia juvenil, S. E. Obiang Nguema aludió a la educación de los padres y al abandono de muchos tutores por no exigir a sus hijos y no dedicarles el tiempo que éstos necesitan. También hizo referencia a la inmigración ilegal como un nuevo factor que ha hecho aumentar la delincuencia en el país: “No tenemos nada en contra de la inmigración legal, pero sí de la inmigración ilegal que aumenta los índices de delincuencia, y ha introducido bandas organizadas en Guinea Ecuatorial”.

Finalmente, el Jefe del Estado aludió a los recientes enfrentamientos judiciales con otros países, concretamente a las acusaciones en Francia y Estados Unidos contra personalidades e instituciones de Guinea Ecuatorial, sobre todo por el caso de los llamados “bienes mal adquiridos”: “Con Francia tenemos suscrito el acuerdo de protección de bienes recíprocos; según este acuerdo, los bienes de cada país no pueden ser violados. Si Francia tiene sospechas de corrupción o desviación de recursos en nuestro país, debería enviar una comisión a Guinea Ecuatorial, para concretar con las instituciones judiciales, para investigar si existen acciones de corrupción, y no llevarnos directamente ante la justicia francesa. Guinea Ecuatorial se ha visto desprotegida a pesar de los acuerdos firmados. Tampoco la Convención de Viena ha sido respetada… Por tanto, no sabemos muy bien en qué se basan estos acuerdos internacionales. Guinea Ecuatorial actúa de forma trasparente, y estamos facilitando nuestros recursos a todos los países del mundo sin discriminación. Reclamamos pues que nos respeten, porque, claramente, esto son actuaciones discriminatorias”.

-“El ambiente de paz y estabilidad que disfrutamos en Guinea Ecuatorial debe ser un bien preciado y protegido por todos los ciudadanos para el bien propio y de la comunidad internacional” –dijo para finalizar el Presidente de la nación.

Texto y fotos: Inés Ortega.
Oficina de Información y Prensa de Guinea Ecuatorial.

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